"Rompemos los vidrios, dice uno de ellos, rompemos las cañerias, los baños, todo lo que tiene que ver con el agua, para evitar que la gente vuelva a habitarlos.
- Y las viviendas que ustedes rompen, son habitables, o...
- ¡Y si! Adentro son palacios, y yo rompo palacios, ¡se da cuenta, señor! Es algo que me disgusta, pero ¿que quiere que le haga? Nos pagan para hacerlo 1.212 euros brutos. O sea, el salario minimo"
Los desvitalizadores son quienes, una vez deshabitados ciertos inmuebles del centro de Marsella, se preocupan de dejarlos inutilizados para habitar. Estos inmuebles eran ocupados por personas pobres o muy pobres, que son desalojadas de distintas maneras, a veces no muy pacificas. Todo esto, por el bien de la ciudad, ya que el plan es hacer de esos edificios habitaciones para estudiantes adinerados, departamentos con valores entre 3.000 y 4.000 euros el metro cuadrado (entre 2 y 2,5 millones de pesos). Y los expulsados son reubicados en viviendas sociales. "la gente como nosotros estropeaba el paisaje" dice uno de los infortunados.
Fuente:
Libro "Urbanismo. Arquitectura y Globalizacion".
Articulo escrito por Francois Ruffin "Pensar la ciudad para que los ricos vivan en ella"
Imagen via Flickr PictFactory
Libro "Urbanismo. Arquitectura y Globalizacion".
Articulo escrito por Francois Ruffin "Pensar la ciudad para que los ricos vivan en ella"
Imagen via Flickr PictFactory
